APRAXIAS
Son trastornos de la eficiencia motriz que incapacitan al niño para realizar determinados movimientos o ciertos gestos. Piaget define la Apraxia como un sistema de movimientos coordinados en función de un resultado o de una intención; por lo tanto, cuando existe la imposibilidad de la concepción del movimiento o de la ejecución del mismo, sobreviene la apraxia.
se presenta una apraxia cuando los movimientos del niño son lentos y mal coordinados; también, si no puede reproducir figuras gráficamente o con el gesto y cuando hay una desorganización del esquema corporal al perder los puntos de referencia (arriba, abajo, izquierda, derecha). En este ultimo caso aparecen la dificultad de imitar gestos simples o complejos y el de desconocimiento de las partes de su cuerpo.
En ocasiones, las apraxias afectan a una parte del cuerpo o una determinada función de la actividad gestual. Puede haber apraxias faciales, posturales, verbales.
Dentro de estos trastornos se pueden incluir las dispraxias, que se refieren concretamente a una falta de organización del movimiento.
Hay dos tipos de niños dispráxicos: aquellos en los que la dispraxia se debe a deficits motores o a agnosias visuales, y aquellos en los que este tipo de trastorno esta provocado por alteraciones graves de la organización psíquica.
Otros problemas que llegan a presentarse son las sincinesias, que consisten en movimientos simétricos asociados. Un movimiento voluntario (mover una mano) trae como consecuencia otro movimiento (la otra mano realiza el mismo movimiento).
La sincinesias son normales hasta los 10 o 12 años; después deberán desaparecer poco a poco, o se requerirá del auxilio del psicometricista.
Son trastornos de la eficiencia motriz que incapacitan al niño para realizar determinados movimientos o ciertos gestos. Piaget define la Apraxia como un sistema de movimientos coordinados en función de un resultado o de una intención; por lo tanto, cuando existe la imposibilidad de la concepción del movimiento o de la ejecución del mismo, sobreviene la apraxia.
se presenta una apraxia cuando los movimientos del niño son lentos y mal coordinados; también, si no puede reproducir figuras gráficamente o con el gesto y cuando hay una desorganización del esquema corporal al perder los puntos de referencia (arriba, abajo, izquierda, derecha). En este ultimo caso aparecen la dificultad de imitar gestos simples o complejos y el de desconocimiento de las partes de su cuerpo.
En ocasiones, las apraxias afectan a una parte del cuerpo o una determinada función de la actividad gestual. Puede haber apraxias faciales, posturales, verbales.
Dentro de estos trastornos se pueden incluir las dispraxias, que se refieren concretamente a una falta de organización del movimiento.
Hay dos tipos de niños dispráxicos: aquellos en los que la dispraxia se debe a deficits motores o a agnosias visuales, y aquellos en los que este tipo de trastorno esta provocado por alteraciones graves de la organización psíquica.
Otros problemas que llegan a presentarse son las sincinesias, que consisten en movimientos simétricos asociados. Un movimiento voluntario (mover una mano) trae como consecuencia otro movimiento (la otra mano realiza el mismo movimiento).
La sincinesias son normales hasta los 10 o 12 años; después deberán desaparecer poco a poco, o se requerirá del auxilio del psicometricista.